Hay veces que ocurren cosas en nuestra afición que nos ponen furiosos y queremos justicia/venganza,como por ejemplo cuando nos dejamos un pastizal en una mini de Finecast para abrirla y ver que tiene mas agujeros que una victima de la matanza de San Valentin y mas burbujas que un anuncio de Freixenet, y nos entran una ganas locas de plantarnos ya no en la tienda sino en un juzgado y ponerles una denuncia a quien consideramos que nos han tomado el pelo para que se les caiga a ellos.O cuando ves en medios de comunicación supuestamente serios las cosas que dicen de los jugadores de rol.Clamamos por la unión de fuerzas entre los aficionados para montar una plataforma,recoger firmas,hacer sentadas,concentraciones,comunicados,vídeo-protestas,...pero al final no se hace nada de nada y parece que se nos va la fuerza por la boca o en este caso,por los dedos.
Realmente,meterse a pleitear con multinacionales o con medios de comunicación es algo muy chungo,ya que pese a todo,tienen ese aspecto(El jurídico) bien cubierto y si hay alguna brecha tiene abogados de sobra para tirarlos sobre ella y taparla.Por no contar con como andan algunas cosas en este país,como es la Justicia.Pero aun incluso cuando hubiese una posibilidad real y factible de con algo así, de ganar algo para el colectivo,esa llama de la esperanza se suele apagar rápido muchas veces desde dentro del propio grupo que se quiere defender.Unos no quieren movidas y prefieren apretar los dientes,mientras que otros quieren negar ese mérito a sus compañeros por envidias o mongoladas si ven que habrá una posibilidad de éxito, e incluso hay gente dentro de la afición que dice una cosa pero hace otra al servicio de los demandados o de una tercera parte que busca un beneficio en río revuelto.
Voy a contaros una anécdota real y verídica que a mi me ocurrió hace tiempo.No diré nombres ni nada,eso si.
Hace más 10 años,yo formaba parte de un grupo de una media docena de personas que queríamos crear una plataforma pro defensa de los juegos de rol y la dignidad de sus jugadores.Dado que la vía penal era algo impracticable e inalcanzable,queríamos hacer actividades,dar charlas,implicarnos con los ayuntamientos y diputaciones, y en definitiva, mostrar la verdad de los juegos de rol. Esperábamos que las actividades tuvieran algún eco en medios de comunicación locales-regionales y tratábamos de crear algo material bilingüe(Soy vizcaíno y eso lo hacíamos gente de allí,así que si queríamos algo en la prensa local,el euskera era imprescindible) para si surgía la ocasión llegar a más lados.
Un día,sin embargo,se nos presento uno que hacia de DM en las partidas diciendo,de forma muy encendida,que había que devolver golpe por golpe a los medios de comunicación y meterles un puro por el orto:había que ponerles una demanda.Nosotros le dijimos que eso era imposible,que el que tiene bien cogida la sarten por el mango no se quema,nosotros no teníamos medios y que no funcionaria.Nos pillo de sorpresa cuando triunfal,nos informo que esa iniciativa(La demanda contra los medios de comunicación) no era suya y la iba a lanzar una conocida editorial/distribuidora que corría con todos los gastos.Si ganaban y había indemnización,con ella harían un museo de los juegos de rol.Solo querían reunir apoyos de aficionados y clubes en forna de firmas y de registro en una web para algo que funcionase "de verdad".La gente se apuntó en masa,incluidos algunos de mis compañeros de la plataforma y el proyecto nuestro fue abortado antes de nacer(És que eramos muy "Softs"para ellos).
Pasó el tiempo y empezaron a haber cambios en el tema de la plataforma de la demanda:Que si los gastos subían mucho por los abogados y que ahora pedían una aportación voluntaria,luego una cuota mensual ridícula,etc...De mientras el que había acaudillado la idea hacia partidas de demostración de juegos de esa editorial y una sospechosa actividad en pro de esa editorial,vamos captando clientes.Llegó a poner el grito en el cielo porque yo quisiera usar un material escaneado para unas partidas.
Los que no nos habíamos unido fuimos marginados.
El tema de la demanda,por otro lado se estancaba en una ciénaga de palabrería vacía con el paso de los meses.Hasta hundirse y desaparecer.Porque?Porque no era más que una campaña de marketing de la empresa y aquel tipo era comercial de ellos.El dinero recaudado,creo que se devolvió,pero aun así el cristo que se monto no fue poco.Algunos se sentían engañados,porque realmente querían esa demanda y esa justicia.Otros había conseguido ventajas con esa editorial y algún trato de favor por lo que contaban.
Los demás,entre los que me incluyo,nos sentíamos traicionados y defraudados por nuestra propia gente.A estos íbamos a a defender?.Cada uno se fue para un lado,al final, tras un intento valiente pero iluso y por lo tanto catastrofico por parte de un par de nosotros de retomar lo de la plataforma de defensa de los JdR y salir trasquilados.Se precipitaron los hechos y durante meses el tema coleo y tuvo graves consecuencias y movidas,hasta para el "casaca roja".
A día de hoy no he vuelto a tomar parte en iniciativas de grupo de esa índole ni a pertenecer a un club de nada(Y el tiempo,desgraciadamente,me ha dado la razón).
Por eso yo creo(Y por mas motivos) que muchas veces el peor enemigo del aficionado es...otro aficionado.
Vamos que te pides ser un groucho marx de nivel 10 no?(si eres fan de futurama pillaras esta coña). "jamas perteceneria a un club que me admita como miembro".
ResponderEliminarMas bien jamas pertenecería a un club que admitiera socios,a secas...;)
ResponderEliminarTe doy toda la razón el peor enemigo es el aficionado, sin comentarios..
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