Hola! He de confesar que, desde hacía un tiempo, había perdido la confianza en Rob. Más que nada porque en los últimos conciertos que le vi, no daba la talla como (no llegaba, no sostenía las notas, hacía cantar mucho al público y charlaba demasiado.... vamos, que e parecía estar de capa caída y cuesta abajo en su carrera). Quizá soy un poco exigene pero, cuando has visto mil conciertos ya no vas siempre a saltar y cantar. Lo haces... pero también dedicas un rato a escuchar y ver el espectáculo de una manera un poco más seria: Como suenan los instrumentos, intentas distinguir las lineas de bajo, si este o aquel tocan bién.... vamos, si el grupo está haciendo realmente un buen directo (y sus técnicos también, claro). Pues tras todo esto he de decir que.... Judas (que siempre serán unos de los pilares del METAL, así, en mayúsculas) actuaron en el RockFest de Barcelona y estuvieron increíbles. Al principio a Rob le costó arrancar, de hecho me esperaba lo de los conciertos anteriores. Pero al segundo o tercer tema se vino todo arriba y volvió a ser un show de calidad SUPREMA. Chorros de baba soltaba del gozo y disfrute que estaba teniendo y volví a botar y brincar cual adolescente desmadrado por los cambios hormonales. Concierto de 10 sobre 10. Muy bueno. En cuanto a Kiss... musicalmente y como espectáculo no defraudarán JAMAS. Cuando los vi en directo en Bilbao, aluciné. Pero siempre les criticaré esa visión tan farisea de la música que tienen, tan marcadamente vista desde el lado del negocio. Sí, evidentemente para un artista su arte es su negocio y "modus vivendi" pero la defensa tan acérrima que hacen de la industria musical clásica y sistémica (controlada por grandes distribuidoras) en sus declaraciones sobre el tema de la piratería, internet, nuevos medios de difusión y, en definitiva, del cambio cultural al respecto del consumo de música, muchas veces me los hace ver más como vendedores de discos que como músicos (no se si me explico). Evidentemente que la industria mantiene a muchos trabajadores y que la música es un negocio para mucha gente, y que sin grande casas discográficas probablemente no habría realmente grandes grupos pero.... es la radicalidad del discurso neo-con, pasando del conservadurismo a ser prácticamente reaccionario lo que hace que no acabe de tenerles una auténtica simpatía. Y dejo de daros la brasa un rato... me voy a escuchar un disco de cada uno de ellos. Pese a lo que he comentado, la influencia que han tenido en el sonido y en la estética han sido de las más relevantes logradas jamás por nadie en el METAL o cualquier otro estilo. Y quien lo dude es que no tiene ni repajolera idea. Bye!
Hola! He de confesar que, desde hacía un tiempo, había perdido la confianza en Rob. Más que nada porque en los últimos conciertos que le vi, no daba la talla como (no llegaba, no sostenía las notas, hacía cantar mucho al público y charlaba demasiado.... vamos, que e parecía estar de capa caída y cuesta abajo en su carrera). Quizá soy un poco exigene pero, cuando has visto mil conciertos ya no vas siempre a saltar y cantar. Lo haces... pero también dedicas un rato a escuchar y ver el espectáculo de una manera un poco más seria: Como suenan los instrumentos, intentas distinguir las lineas de bajo, si este o aquel tocan bién.... vamos, si el grupo está haciendo realmente un buen directo (y sus técnicos también, claro).
ResponderEliminarPues tras todo esto he de decir que.... Judas (que siempre serán unos de los pilares del METAL, así, en mayúsculas) actuaron en el RockFest de Barcelona y estuvieron increíbles. Al principio a Rob le costó arrancar, de hecho me esperaba lo de los conciertos anteriores. Pero al segundo o tercer tema se vino todo arriba y volvió a ser un show de calidad SUPREMA. Chorros de baba soltaba del gozo y disfrute que estaba teniendo y volví a botar y brincar cual adolescente desmadrado por los cambios hormonales. Concierto de 10 sobre 10. Muy bueno.
En cuanto a Kiss... musicalmente y como espectáculo no defraudarán JAMAS. Cuando los vi en directo en Bilbao, aluciné. Pero siempre les criticaré esa visión tan farisea de la música que tienen, tan marcadamente vista desde el lado del negocio. Sí, evidentemente para un artista su arte es su negocio y "modus vivendi" pero la defensa tan acérrima que hacen de la industria musical clásica y sistémica (controlada por grandes distribuidoras) en sus declaraciones sobre el tema de la piratería, internet, nuevos medios de difusión y, en definitiva, del cambio cultural al respecto del consumo de música, muchas veces me los hace ver más como vendedores de discos que como músicos (no se si me explico). Evidentemente que la industria mantiene a muchos trabajadores y que la música es un negocio para mucha gente, y que sin grande casas discográficas probablemente no habría realmente grandes grupos pero.... es la radicalidad del discurso neo-con, pasando del conservadurismo a ser prácticamente reaccionario lo que hace que no acabe de tenerles una auténtica simpatía.
Y dejo de daros la brasa un rato... me voy a escuchar un disco de cada uno de ellos. Pese a lo que he comentado, la influencia que han tenido en el sonido y en la estética han sido de las más relevantes logradas jamás por nadie en el METAL o cualquier otro estilo. Y quien lo dude es que no tiene ni repajolera idea.
Bye!