Reavers of Blood Sea, de Richard A. Knaak: Reseña

Soy un desastre. Lo reconozco y no me siento nada orgulloso de ello, pero intento por todos los medios ponerle coto. Hace meses prometí una reseña de la novela Reavers of Blood Sea (Monstruos del Mar Sangriento, en español), la tengo escrita en Word... y se me olvido colgarla hasta ayer. Menuda cabeza la mía.
Bueno, mas vale tarde que nunca, no?

Reavers of Blood Sea es la cuarta novela de la serie La Guerra del Caos, de Dragonlance. Escrita por Richard A. Knaak, que como ya dije una vez de el, es el "escritor de los Minotauros" de Dragonlance, fue publicada en 1999 por WotC. Salio por primera vez en tapa blanda, con portada a color de Jeff Easley y 313 paginas de extensión, incluyendo un mapa de los territorios de los Minotauros. Después de esto, ha sido re-editada varias veces, en formato físico de tapa blanda y en varios formatos digitales. En el año 2001, Timun Mas la saco en español, con traducción de Mercedes Zorrilla Díez. Salio con el titulo de Monstruos del Mar Sangriento porque la palabra "Reaver", que es una palabra inglesa que viene del inglés antiguo y a su vez del Alto Germano, tiene una traducción algo complicada al español (Se suele traducir como "Merodeador", Saqueador" o "Atracador"), así que aunque no es exacta la traducción, queda bien y es apropiada con la historia que cuenta. Volviendo a la edición española, la extensión es de 366 paginas y en vez de tapa blanda a color, es de tapa dura a color. Pero el resto se mantiene. En 2008, Altaya re-edito la novela con el mismo formato y extensión, sin mas cambio que enmarcar la ilustración de la portada como solía hacer habitualmente con las obras de D&D.
Yo tengo la edición física original de 1999, una edición digital en inglés y otra en español.

La acción de la novela se sitúa en el eje temporal de Dragonlance tras la Guerra de la Lanza y  durante el Verano del Yunque, unos 40 años antes de la Guerra Civil de los Minotauros. Chot es el emperador de los Minotauros y los disturbios que azotan las masas continentales no parecen por ahora afectar a los Elegidos de Sargas.
Aryximaraki de-Orilg, Aryx para los amigos, es un joven Minotauro con ancestros ilustres (Su linaje se remonta al mismísimo Kaz Matadragones, el inseparable amigo de Huma) que se ha enrolado como marino en el barco "Ojo del Kraken". Todo va bien, pero tras meses de travesía, su nave es envuelta por una extraña niebla, y asaltada por  por unos extraños seres crustáceos-humanoides (Luego se sabe que son los Magoris) que masacran a toda la tripulación menos a el, que se salva por pura suerte (O mas bien por intervención divina) y le hacen naufragar.
Tiempo mas tarde es recogido por un buque de guerra de los Caballeros de Takhisis  y llevado ante sus lideres, entre los cuales se encuentra un misterioso minotauro de pelaje escarlata. El no sabe pero lo sabrá pronto: La Guerra del Caos ha estallado y va a envolver a su patria como al resto del mundo en muerte y destrucción. Caos ha decretado que todo Krynn y sus moradores deben ser destruidos y los Minotauros, los hijos de Sargas, han de ser exterminados por uno de los mas terribles siervos de Caos, el ser conocido como Serpentin. Si humanos y Minotauros de todos los credos no se unen a los dioses en la batalla contra Caos, será el fin.

Knaak estuvo un tiempo ausente de los Minotauros y de Krynn y retomo sus historias con una trama de acción muy apropiada para esta raza.
Los Minotauros son vueltos a presentar como un pueblo avanzado, orgulloso y culto, aunque se hace mas hincapié esta vez en su creencias religiosas y en su deseo de ser dueños no solo de su destino si no también del mundo, del cual se consideran dignos herederos. Se aleja totalmente de la imagen arquetípica de los minotauros en otros entornos de fantasía y se profundiza mas en sus peculiaridades como raza de Krynn.
Pero, de nuevo, se nos vuelve a poner a los Minotauros como una raza poderosa que es una y otra vez obligada a ponerse al servicio casi como esclavos de otros poderes. La Reina de los Dragones reclama que estos se sometan a sus Caballeros, pero hay mas dioses implicados y con ellos sus agentes, tanto del Bien (Como Kiri-Jolith, y su clérigo, el humano Rand) como del Mal y la Neutralidad, lo cual nos plantea una serie de conflictos y tensiones muy interesantes: Los Minotauros entre ellos por sus creencias y su forma de ver la vida y estos contra los Caballeros de Takhisis, cargados de prejuicios (Algunos comprensibles, como la sub-comandante Carnelia, sobrina del jefe de la expedición de los Caballeros, Lord Broedius) que los tratan como escoria sin saber todo lo que depende de los Hijos de Sargas, incluso de aquellos minotauros que no le siguen como dios. Son cosas que dan tensión y puntos de vista interesantes, en un libro donde los combates, la lucha y la epicidad mas desesperada tienen un gran peso.

La acción es rápida y trepidante, las descripciones muy precisas y detallistas y el ritmo de la narración es el adecuado, como suele pasar con todas las novelas de Knaak. Es muy entretenida, perfecta para los que busquen un libro bien escrito sin mas pretensión de tener entre sus manos una aventura de acción en un entorno de fantasía. Hay sorpresas y mucha información de trasfondo que gustara a los aficionados a Dragonlance, ya que Knaak ha sido como siempre en sus novelas sobre Krynn cuidadoso para evitar conflictos de canon.
No es tan detallada en cuanto a trasfondo en si mismo de los Minotauros como la trilogía de las Guerras de los Minotauros, pero dado que es un solo libro, dentro de una serie que no trata sobre Minotauros precisamente, tiene profundidad sobre ellos mas que de sobra.

En pocas palabras, se lee muy rápido, esta bien escrita, es entretenida y ademas se puede coger prácticamente como un libro aparte, aunque como nexo entre las historias de Kaz y la trilogía de Las Guerras de los Minotauros va muy bien. Es un acierto a tiro seguro si te gusta la acción, pero la acción bien estructurada y con narración que le de un buen y lógico uso.
Yo creo que os podrá gustar y para mi es mas que recomendable